Por Baudilio Domingo Navarro Quintero

Tomás Padrón vuelve: ''Los diputados periféricos nunca se han unido para votar contra las dos grandes, ni las dos grandes en contra de las cinco pequeñas''

Esta gran noticia por mis ojos hoy leída en el Diario el hierro, me ha obligado escribir lo que siente mi sentir.

¡UNA HISTORIA NOBLE Y VERDADERA!

Lleno de sentir e inquietud a mi inquieta y respetuosa pluma pido que sea capaz de en blanco papel plasmar hilvanadas letras que me hagan recordar bellos tiempos pasados donde había respeto, convivencia y admiración entre las y los que no pensamos políticamente igual, pero que si queríamos lo mejor para nuestra querida isla de El Hierro.

Hace diecinueve años concretamente el año 1999 mi querido y dilecto primo amigo Pablo Gutiérrez Reboso me entregó un sobre color sepia que contenía una invitación, para asistir al acto de la celebración del veinte aniversario de la Agrupación Herreña Independiente (A.H.I. ) Ignorando por su parte, que yo a través de mis compañeros de ICAN. Tenía en mi poder dicha invitación, pues por ellos había sido designado portavoz de ICAN para intervenir en su nombre en dicho aniversario dada la afinidad y simpatía que en aquellos entonces dichos partidos políticos tenían.

Debiendo reconocer y lo reconozco que me sentí muy orgulloso de ser yo el portavoz. A la vez que también me sentí “molesto” ya que dicho aniversario me recordaba que tenía sobre el lomo veinte años más. Veinte años que cómo bien dice una querida amiga en el prologo de unos de mis libros me han servido para ser un poco más “viejecito” de la historia y un poco más “viejecito” de la vida. Y cómo tengo buena memoria, sobre todo para recordar lo bello y olvidar lo feo, bien recuerdo que ese día el Centro Cultural de Asabanos rebosaba de militantes y simpatizantes de la Agrupación Herreña Independiente. Tanto es así que hasta recuerdo que en dicho acto se hizo entrega del carné de militante de la A.H.I. Número mil. A la vez que también recuerdo los aplausos que al final de mi intervención me brindaron.

Y por supuesto el emotivo abrazo de Tomás Padrón Hernández a mi humilde persona en el escenario dado, abrazo que muy sincero a él por mí también le fue dado. Lo que me obliga pensar y a la vez recordar que treinta y nueve años de democrática vida viviéndola en una isla por mi tan querida, viviendo entre mis defectos o pecados por expresar respetuosamente lo que siento, bien se merecen que mi sentir e inquieta pluma y mis nobles intensiones les narré o mejor dicho les escriba mi intervención en dicho acto, con la sana intención de recordar bellos tiempos pasados. Tiempos pasados que mucho hecho de menos y que con ansias espero y deseo por el bien nuestra querida isla retornen. Siendo mi intervención en dicho acto la siguiente, por supuesto pidiéndoles benevolencia ya que éste hoy mi sentir y escribir lo hago de memoria.

¡Mi intervención o mejor dicho mi sentir en el VEINTE ANIVERSARIO DE LA A.H.I. Ciñéndome al protocolo al escenario subo y se me acerca el amigo Miguel Ángel Machín Fernández, quien en su calidad de Secretario me pide que no me alargara mucho, mi contesta a él fue la siguiente, no te preocupes que sólo me alargaré lo justo y necesario.

-Señoras y señores muy buenas noches. Antes que nada agradecer la invitación tanto a la A.H.I. Cómo a mis compañeras y compañeros de ICAN la invitación a mi persona en éste, para mi tan emotivo e histórico acto, en el que desde esta altura mirarlos a todas y todos ustedes muy especialmente a Tomás Padrón Hernández, con mi sentir y voz decirles que zarpo con mi pequeño y marinerito barco y con rumbo aguja trazado sobre la carta náutica, emprendo el navegar de las singladuras que me adentran en las mares del sano pensamiento.

Y en este navegar arribo a un hermoso Archipiélago llamado Canario y en una de sus islas llamada El Hierro, en la tranquilidad y transparencia de su mar abro el cuaderno de Bitácora y compruebo la página que me señala el año 1979 año en el que después de mucho tiempo pasado se celebran elecciones democráticas en está por mi llamada querida isla y en todo el País.

Recuerdo porque tengo buena memoria que hace veinte años encontrándome en la discoteca Zabagu de la Villa de Valverde, no bebiendo copas porqué el alcohol nunca me ha gustado, entre otras cosas porque falsamente me hace sentir ser un dios, bebía una tónica que su envase me recordaba al refresco llamado “Luján” que se fabricaba en la Villa y que muchas veces acompañado de una buena quesadilla me despacharon Pablo, Julián y muy especialmente mi recordado y querido primo Berto, primero en el Bar Armiche y después en el Bar Los Reyes. Bebiendo tónica y contemplando las zaleas y cuernos que decoraban la Discoteca Zabagu estaba, cuando se me acercó el amigo y buen profesor Sebastián Cabrera Perdomo- Chano cómo yo lo llamo y me comentó la creación de una Agrupación de Herreños Independientes para presentarse en las elecciones y luchar por nuestra querida isla.

Yo le agradecí la confianza en mi persona depositada y le dije que hacía años que militaba clandestinamente en el Partido Comunista de Canarias y no votaría por la Agrupación Herreña de Independientes y menos votaba si el que encabezaba la lista al Excmo. Cabildo Insular era Tomás Padrón, porqué con él no iba ni a misa. Chano respetó mi argumento y salimos a tomar un cortado al Bar Zabagu, pero a llegar al Bar no sé si por el azar o el acaso en la barra se encontraban charlando Tomás Padrón y mi cuñado Lalo Carballo.

A ellos saludamos y recuerdo que Tomás Padrón me dijo, Navarro si no tiene en que bajar para el Puerto puede si quiere bajar conmigo.

Automáticamente, hipócritamente y egoístamente le dije Gracias, gracias Don Tomás.

Y salimos del Bar mi cuñado Lalo, Don Tomás y yo hasta donde tenía aparcado su Sinca Rojo y bajamos para el Puerto no sin antes despedirnos de Chano, quien nunca por respeto me comentó ni reprochó, que diez minutos antes le hubiera dicho que con Tomás Padrón no iba ni a misa y diez minutos después egoístamente para ahorrarme una caminada hasta el Puerto subía a su coche. Diciéndome mi conciencia que chambón eres Domingo no sabes mantener tu lugar y le dije vete al carajo muchacha, una caminada hasta el Puerto es una caminada y más a las once de la noche.

Pasaron los meses y comenzó la Campaña Electoral en la que la Agrupación Herreña Independiente presentaba Lista o Plancha a Excmo. Cabildo Insular y el Partido Comunista Presentaba Lista o Plancha a los dos Ayuntamientos.

Por esto en una Asamblea celebrada en el Local del Partido Comunista del pueblo del Pinar, mis queridos amigos Aurelio Ayala Fonte y Máximo Padrón Quintero con todas sus buenas intenciones de entonces, propusieron a la Asamblea que votáramos al Cabildo Insular a la Lista o Plancha de la Agrupación Herreña Independiente. Aún no habían terminado sus intervenciones, cuando con mi ofuscación y voz alzada les dije, ustedes pueden cantar misa y votar por quienes quieran, pero yo por Tomás Padrón no voto. Tanto Aurelio, Chano y muchos compañeros intentaron noblemente convencerme para que mi ofuscamiento me permitiera separar los higos de las almendras. Pasaron dos semanas desde aquella Asamblea y celebramos otra en el Local de la Muy Ilustre, Noble y Leal Villa de Santa María de Valverde y Aurelio y Chano dale que te dale con la misma canción que las semanas pasadas en el pueblo del Pinar.

Pero sucedió que en está Asamblea estaba presente, quien con ¡SU GRAN AMOR! Contribuyó a darme el ¡SER Y LA VIDA! Para después ser quien soy y quien con el paso de los años he sido. Mi muy querido y respetado ¡PADRE! Quien justo a mi lado en esa Asamblea se encontraba y con su paz y sabías palabras intervenir, para decirme no me sea querido hijo impulsivo y mucho menos ofuscado, haga caso a lo que le dicen sus amigos y le dice su padre, añadiendo, quien ¿sabe? ¿Y porqué no un piñero? Puede con su rumbo trazado saber llevar bien el timón del Cabildo Insular.

No digo que no hayan influido en mi cambio de pensamiento mis amigos del Partido Comunista, pero aseguro que quien más influyó en mi cambio de pensamiento a la vez que eliminando mi ofuscamiento, fue mi querido y buen Padre que cómo Capitán, Patrón, Marinero y Pescador siempre supo trazar el rumbo de mi marinerito barco, indicándome el norte verdadero cuando en algunos momentos de mi navegar por la vida lo he perdido.

Por todo esto honradamente digo que en estos veinte años pasados nunca me ha pesado haber sabido escuchar a mis queridos amigos del Partido Comunista y haber sabido escuchar a mi querido y buen Padre.

Por eso señoras y señores permítanme que está noche respetuosamente también les recuerde tres refranes muy usados en nuestra querida isla y que son.

LAS PALABRAS EL VIENTO SE LAS LLEVA.

LO ESCRITO, ESCRITO QUEDA.

Y DIME CON QUIEN ANDAS Y TE DIRÉ QUIEN ERES.
A la vez que de ellos, noblemente les expreso mi sincera opinión.

Al primero le doy toda la razón ya que durante años lo he vivido en mis carnes y no porqué mis palabras el viento se las lleve, sino que por algunas y algunos no he sido escuchado y si con mentiras difamado.

Al segundo le doy toda la firmeza y pongo cómo ejemplo los Letreros del Julán, La Candia, El Jorado, La Caleta y Tegelehita únicos en el mundo y que por ninguna mente hasta el momento han sido descifrados y que tanto orgullo le han dado a nuestra querida isla.

Y al tercero le doy poquita importancia ya que no me interesa que me digan quien soy, porqué mi conciencia bien me dice con quien ando y bien me dice con quien estoy. Siendo para mí un gran honor estar aquí está noche con todas y todos ustedes.

GRACIAS, MUCHAS GRACIAS.

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