Por Juan Jesús Ayala
El Remdesivir es un nuevo fármaco de los llamados antivirales que se desarrolló como tratamiento del Ébola y que a partir de la pandemia del Covid- 19 se usa contra esta enfermedad pero durante un intervalo de tiempo que no ocupe mas de 5 días ya que tiene efectos colaterales graves afectando con mayor particularidad al hígado y riñón ; y aunque no es un tratamiento curativo, ni tiene evidencia clínica, se une al protocolo terapéutico para adultos y mayores de 12 años que necesitan oxigeno y con neumonía bilateral grave, lo cual en muchos de los casos, al menos acorta el tiempo de hospitalización.
Pues bien ante el rebrote que se está padeciendo actualmente viene la noticia que los centros hospitalarios no tienen la suficiente cantidad de este medicamento ,llegándose a situaciones similares a las que se daban cuando se ponían medidas como si de una medicina de guerra se tratara, instaurándose el método del “triaje” ya que era tal la avalancha de enfermos a los hospitales que tenían que priorizarse a aquellos que podían, intuitivamente, tener mas posibilidades de vivir que otros, desechándose de antemano a personas de mas de 75 años relegándolos al ostracismo y a una muerte segura. Y no digamos de los mayores que se dejaban en las Residencias infectados por esta enfermedad y confinados en su propia habitación hasta su muerte como si se estuviera en los días más negros de las prácticas ejercidas por el nazismo hitleriano
Así que, si antes fue el triaje selectivo ahora la selección se hace para administrar el remdesevir con idéntica metodología de actuación, mientras que los mandatarios públicos no se cansan de decir a través de lo medios oficiales que tienen a su alcance que hay que apelar a la responsabilidad individual y colectiva de los ciudadanos, pero ante esto habrá que preguntarse ciertas cuestiones :¿y la de ellos, cual ha sido?.¿Donde están los rastreadores en numero suficiente teniendo en estos momentos que recurrir al ejercito para que ayude en esta tarea?¿Donde los refuerzos sanitarios que se prometieron?¿Donde la prevención adecuada, porque si no hay reactivos para hacer pruebas diagnosticas , sobre todo, a los que se suponen portadores, la cadena epidemiológica no se romperá? ¿Qué hacer?.¿ Qué sigan contagiando o confinarlos sin ton ni son sine día? ?Donde los stock necesarios de ese medicamento que se agotará en pocos días porque hay estados mas poderosos, como los EEUU que ha hecho acopio de la mayoría de ellos?¿Donde las promesas de reubicar en puestos de trabajo fijo para mejorar la asistencia, a los sanitarios que se han jugado la vida con salarios de miseria, mientra muchos de nuestros queridos políticos se repanchingan en una vida placentera, por más que digan que lo pasan muy mal?¿Donde las medidas de vigilancia que deberían haberse puesto en práctica mucho antes y que ahora se toman con crudeza y con una autoridad, a veces ilimitada para encubrir incapacidades?
Siempre se ha considerado que la primera línea de choque en el campo de la sanidad es la Asistencia Primaria, y que había que tenerla muy en cuenta Y ¿Qué se ha hecho?, ¿Cuántos consultorios se han cerrado y cuantos se han reforzado con el personal suficiente y necesario para atender no solo a los que están bajo el rigor de la pandemia sino al resto de enfermos a los que no se les debe relegar a un segundo termino en una sanidad que se denomina de las mejores del mundo?
Y nada mas erróneo: si, de las mejores en lo que concierne al personal sanitario, que es altamente cualificado y a unas instituciones relativamente bien dotadas, pero un sistema de salud barato ya que los gobiernos no invierten lo suficiente en sanidad y la parte del PIB que se dedica es lo que mas o menos corresponde al gasto de Corea del Sur o Polonia, muy alejados de países tales como Alemania o Francia. Y la consecuencia de todo esto ¿qué es? .Pues que se actúe dando palos de ciego al no tener los dispositivos terapéuticos necesarios y contar con un personal en precario machacado en un escenario sanitario y económico plagado de incertidumbre que no la han producido solo aquellos a los que se invoca responsabilidad; la responsabilidad es mas amplia y no excluye a nadie, incluido mandatarios. Porque si todas las preguntas y más que circulan por el ambiente no se les han dado respuestas , no toda la culpa la tendrán los que propagan y sufren la enfermedad sino que habrá que mirar también para otro lado, y que es el fundamental, ya que no han dado la talla en un periodo de la historia de los pueblos, que un día dicen lo contrario que lo que manifiestan al día siguiente, situándonos muchas veces en la mas absurda de las confusiones.
