Por Juan Jesús Ayala. 

En Valverde los locales  en los que se cortaba el pelo a los hombres se conocían como barberías, dejando el término de peluquerías para aquellos que atendían a  las mujeres. Pues bien en Valverde, en el inicio de La Punta de la Carretera  donde terminaba el adoquinado de la calle doctor Quintero se encontraba la barbería de Guzmán, situada concretamente en lo bajo del  edificio, ya demolido, de la Sociedad “La Aurora”.

En la época de nuestra juventud acudíamos a ella  y, además,  no solo para cortarnos el pelo , lo hacíamos también con curiosidad  porque Guzmán  era la  novedad. Sus cuentos y anécdotas tenían un  contenido ciertamente original y con un tono amistoso  se nos pasaba el tiempo porque sus alegatos nos entretenían y como muchas veces se mantenía un cordial dialogo  su trabajo se dilataba  un poco mas de lo establecido.

Fue Guzmán  uno de los personajes interesantes de Valverde y que antes de   usar sus servicios ya  lo habíamos visto tocando  con maestría su inigualable clarinete  en las fiestas del verano tanto el día de San Juan en el Tamaduste, como en la fiesta del Carmen en La Caleta, lo mismo que en la plaza de Echedo allá por San Lorenzo y la Candelaria. Y mas tarde cuando  frecuentábamos los bailes nos acercamos algún que otro domingo o día de fiesta a “La Aurora” y allí  estaba Guzmán sentado  al frente del piano tocando con  su habilidad musical pieza tras pieza amenizando  los bailes de la época.

Casi enfrente de su barbería   se encontraba “el muro” que acogía  a los tertulianos y parroquianos del bar Armiche de don Isidro y a los que iban o salían de la barbería   y cuando no habían en determinados momentos clientes o estaba a la espera del próximo   dejaba  sus utensilios de  trabajo y compartía conversaciones  con aquellos que allí se encontraban hablando  de esto o de aquello. Y muchas veces estando en ese muro, lo esperábamos, y como vivía en  El Cabo ya lo veíamos por casa de don Claudio con su bolsa   bajo el brazo dispuesto a desarrollar el trabajo en su barbería.

Ferreteria El Cabo Pie

La barbería de Guzmán junto a  la de  Baldemoro y mas tarde la  de Fernando  en “El Puente” fueros sitios que se propiciaban para la tertulia y el encuentro donde  se oía todo tipo de conversaciones tanto de política  hasta lo que había acontecido en tal y  tal fecha.

La barbería de Guzmán tenia dos sillones de trabajo y alguna que otra vez  se utilizaba para la espera  el que estaba vacante mientras  pelaba y así la participación en la conversación era mas directa y  fluía  a tres bandas donde dominaban   las ocurrencias  que nos hacían reír  o simplemente poníamos  oídos a los comentarios que circulaban en aquel circunstancial espacio.

Estuvo, Guzmán en esa barbería muchos años  hasta que se mudó   cuando se demolió el edificio donde trabajaba  a un lugar  cerca  donde estaba la antigua botica de don Felix , en el que ya se jubila.

Siempre hemos recordado y hablado de Guzmán como  personaje   interesante  y original  dado que, aparte de su trabajo,  tuvo en la música  su afición favorita  donde la pregunta en vísperas de aquellas fiestas antes mencionadas era ¿Viene Guzmán con su clarinete?.

Y hoy, nos llega una vez  mas a la memoria y será motivo de nuevos encuentros con aquellos que allí, en su  entorno conocimos y disfrutamos de su presencia, hoy envuelta en una sentida añoranza.