Redacción/El grupo municipal de la Agrupación Herreña Independiente (AHI-CC) en el Ayuntamiento de La Frontera propondrá en el próximo pleno de la Corporación la rehabilitación integral de este enclave para su aprovechamiento económico, turístico, cultural y medioambiental. Los nacionalistas defienden el potencial de este lugar para combinar actividades.

Los nacionalistas solicitan la rehabilitación de las estructuras salineras y los hornos de cal, que se encuentran en un evidente estado de deterioro, y la conversión de las salinas en un centro de interpretación del oficio de la sal, presente en todas las islas del archipiélago y con gran arraigo en otras épocas.

El portavoz de la AHI en el Ayuntamiento de La Frontera, Pablo Rodríguez Cejas, señala que “el interés etnográfico de las salinas y su relevancia en la historia reciente de El Hierro justifican perfectamente que este espacio se pueda incluir en la red de puntos de interés que ya gestiona la empresa pública Meridiano, del Cabildo de El Hierro, pudiéndose complementar la visita al Ecomuseo de Guinea con una ruta guiada por las salinas y el horno de cal de Las Puntas” expresa Rodríguez Cejas.

“Para ello se deben dar primero los pasos precisos y debe ser el propio Ayuntamiento quien proponga al Cabildo y a la Comisión Insular de Patrimonio trabajar en esta línea, dinamizando este espacio con la combinación de actividades relacionadas con el turismo, la economía, el medio ambiente y la cultura” expresa el portavoz nacionalista.

Muebles El Placer Pie

Además, los nacionalistas proponen en la moción que se impulsen procesos de formación para el oficio de salinero, garantizando la puesta en funcionamiento de las Salinas de Las Puntas con personas que conozcan el oficio, así como su mantenimiento y aprovechamiento futuro. En paralelo se debería adecuar el sendero que conduce desde el mirador de Punta Grande hasta Las Salinas de Las Puntas.

Los nacionalistas subrayan que, según se detalla en diferentes estudios y publicaciones bibliográficas, las Salinas de Las Puntas se remontan a 1680, siendo explotadas con carácter privado pero abandonadas más de un siglo después, en 1785; seguramente por su baja productividad. Años después, el gobernador de armas, Juan de Urtusuástegui, describe tal enclave en su «Diario de Viaje a la isla de El Hierro en 1779» en los siguientes términos:

"Compónese de dos grandes estanques y el cocedero con fuertes murallas de sillería argamasada. En todas las mareas entra el agua al primero, que recogerá al pie de 3.000 pipas, por una acequia labrada a fuerza de pico en la punta que se avanza al mar, con su compuerta para darle o embarazarle la entrada, de ésta sube por medio de una bomba al segundo y al tal cocedero por otra que suele jugar una máquina movida por el viento"