Redacción/El Hotelito de Punta Grande, el conocido como el “hotel más pequeño del Mundo”, ubicado en el municipio de La Frontera, finalmente no cerrará sus puertas, tras las numerosas muestra de apoyo y ánimo recibido, según ha informado hoy el propietario de la instalación turística, Bien de Interés Cultural (BIC), Davide Nahmias.
Su propietario había anunciado, el pasado mes de julio, el cierre de la instalación turística a finales de 2023, aludiendo a la dejadez de las instituciones, así como a diferentes ataques recibidos y el vandalismo al que han sido sometidos continuamente.
Davide Nahmias, propietario de la instalación turística, ha explicado que el Hotel Punta grande “no cerrará, ¿Por qué? Porque no queremos, porque todo nuestro amor, pasión, dinero y salud están aquí dentro. No somos solo un pequeño hotel, somos su alma” expresa.
En este sentido, Nahmias, relata que en abril de 2018 Lamberto y Britta Wagner (anteriores propietarios de la instalación) les entregaron la llave de un sueño y lo sigue siendo. “Es nuestro hijo, un hijo grande al que habían abandonado y sobrevivía con zapatos rotos. Huérfano de cariño, de atención y de calor humano”.
“Cuando llevas mucho tiempo luchando por dicho sueño y este se ha hecho realidad, deberías saltar de júbilo, de alegría, deberías sentirte realizado. Para nosotros no ha sido así. ¡Y contaré por qué!, nadie se va a quedar con las ganas de saber todo lo acontecido en este tiempo. Tiempo al tiempo” asegura Nahmias.
Según explica el actual propietario del Hotel de Punta Grande, ninguna institución herreña se ha pronunciado acerca del cierre anunciado, “ellos valorarán si les interesa arreglar el muelle de Punta Grande, otro Bien de Interés Cultural”, por contra, asegura Nahmias, “los canarios si han alzado la voz, de todas las islas, incluida El Hierro, muchos habéis llegado y nos habéis rogado y animado a mantenerlo abierto. Muchos venís cada año y os quedáis con nosotros, sois familia, amigos”.
Nahmias, explica que el anuncio de cierre “no ha sido un farol, ha sido un placebo; después de casi 6 años llegamos a un estado de bloqueo emocional que solo nuestras hijas pagaron. Ellas tampoco lo entendían, pero han aprendido que la salud mental es lo primero porque en casa ha faltado tras varios ataques a nuestro establecimiento y a nuestro hogar”.
“Hemos sentido miedo, sufrido pintadas, insultos, difamaciones en redes sociales, amenazas, y todo un etcétera de terrorismo psicológico que derrumbaría a muchos. A nosotros no, ya no. No sabíamos con lo que nos íbamos a encontrar; no somos canarios de nacimiento” asegura Nahmias.
“Vivimos en un paraíso y hemos tenido la suerte de haber ayudado a crecer a nuestro único varón. Es nuestro hijo y no podemos incurrir en los errores del pasado, ya lo habían maltratado y nosotros no haremos lo mismo, lo vamos a seguir cuidando y mimando” expresa Nahmias.
“David y Paula no tiran la toalla, nuestro hotelito seguirá abierto mientras sigamos vivos. Gracias, amigos canarios, gracias al universo por habernos transportado hasta aquí para recuperar un sitio único e icónico a nivel mundial que había muerto, gracias al amor que nos une para seguir disfrutando de nuestro sueño y luchando por él. El hotel Punta grande es nuestro, pero está en Canarias
