Emilio Hernández/Algo huele mal en Dinamarca, se escuchaba en Hamlet, y es obvio que es aplicable a lo que ocurre en la Unión Deportiva Valle Frontera que no ha terminado todavía de cerrar las heridas de la temporada pasada y ha empezado ésta con con ellas gangrenadas, y es una lástima porque el juego desplegado por los rojiblancos ante el Atlético Unión Güímar mereció un algo más que un simple cero dos y a otra cosa. Pero si ante el Juventud Laguna hablamos de detalles, en este encuentro un poco de mala suerte si, pero sobre todo, divorcio entre jugadores y parte de la afición o una tímida despedida de Pablo Moreno, una situación a reconducir

Quiso desde el primer momento el mando del encuentro el conjunto rojiblanco, la iniciativa, buscar la meta de Alejandro, se envenenó el centro de Juan y el gol pareció querer resistirse, buenos minutos locales, ante un Güímar bien posicionado. La movió Rudy para que Dani encarase al meta visitante, resolvió la jugada Díaz Trujillo señalando los 11 metros. Enmendó Alejando ante William y posteriormente desvió el remate de Ernesto, apareció el guardameta en los momentos clave del encuentro, tres grandes intervenciones.

La puso Omar por encima de Pocholo para que la recibiese Gaizka se hiciese un espacio, el ángulo para buscar el gol, disparo seco que encuentra en la pierna de Kevin el efecto justo para partir la cintura a Aitor, 0-1, tocaba volver a remar contra corriente cuando el reloj marcaba la media hora de juego.

Arrancaron la segunda mitad con ganas ambos conjuntos, con un Frontera decidido a recortar y un Güímar buscando matar el encuentro, salidas rápidas a sus puntas. Se fue a la ducha Melo, agredió a Kevín no solo nuestra cámara lo vio, también González González.

Desencadenó la jugada los mejores minutos de juego local, se fue Kevin a la banda cogió la manija Rudy, pero cuando vienen mal dadas, las ganas y el esfuerzo parecen no encontrar premio, gran intervención de Alejandro para evitar la igualada, después la diosa fortuna evitó que este gran disparo de Éibar acabse en gol.

La suerte que tuvo Alejandro le falto a Pablo, que acababa se sustituir a un lesionado Aitor, creyó en sus posibilidades Jony y encontró premio cuando el encuentro languidecía en los minutos del descuento, 0-2, cuarta derrota consecutiva y espera el Isora que iguala en números.