La posibilidad del establecimiento de un Parque Nacional Marino en la Isla, es uno de los temas que más ha suscitado interés por parte de los herreños en los últimos tiempos, un asunto del que, a pesar de su relevancia, por las implicaciones y repercusiones que podría conllevar, se sabe bien poco, o por lo menos nadie se ha tomado la molestia de explicarlo bien a fin de arrojar luz sobre algo tan importante y delicado para la gran mayoría de los herreños.

Desde el momento en que se conoció la propuesta, nada ha ido más allá de algunas reuniones y exposiciones públicas realizadas para el público en general de forma bastante tímida, y de los contactos, algunas veces frecuentes, de la parte interesada en la implantación, con algunos colectivos favorables al parque, así como algún que otro contacto a modo de sondeo con otros colectivos y la opinión pública, “todo más o menos de forma meridianamente interesada en algún sentido”. No ha existido una exposición o explicación clara, responsable, certera y fehaciente, de esas de luz y taquígrafos acerca de lo que significaría el establecimiento de un Parque Nacional Marino en la isla de El Hierro.

“Lo que no son cuentas, son cuentos”.

La realidad, es que a día de hoy, se sabe bien poco de este asunto y entre los que saben algo, hay versiones contradictorias, producto de la falta de información al que ha sido sometido este tema para el público general.

Lo cierto es que recientemente se ha dado a conocer que el Cabildo viene trabajando desde hace dos años, con el Organismo Autónomo Parques Nacionales y el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, a la par que se han mantenido algunos encuentros con los colectivos que se verían más afectados en la utilización de las aguas que estarían dentro de los límites del parque, como es el caso de los pescadores profesionales, recreativos y centros de buceo, que han puesto sobre la mesa sus dudas, y “la gran pregunta”, como esta figura de protección podría afectar en el futuro a sus actividades.

Encuentros estos, que más allá, del avance anunciado, se desconoce a día de hoy, las conclusiones que han arrojado, y sobre todo, si estas serán tenidas en cuenta en el documento del futuro parque.

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Resulta curioso, que el establecimiento de una figura de tal envergadura en El Hierro, no haya resultado interesante para algunos de nuestros gestores a lo largo del tiempo, que se han mantenido en silencio y a la expectativa, sin hablar de ello, esperando no se sabe muy bien que. 

De la misma forma resulta inquietante que esta cuestión genere una situación de alerta y cierta preocupación entre los herreños, más aún cuando este hecho debería ser el “culmen” para una Isla como El Hierro, con más del 60% de su territorio protegido bajo diferentes figuras de protección y como reconocimiento del camino emprendido desde hace años y que le ha hecho merecedor de títulos como el de Reserva Mundial de la Biosfera, el Geoparque, el establecimiento de la Reserva Marina en Las Calmas o el propio proyecto, ya realidad, de Gorona del Viento, así como otros títulos que manifiestan el respeto y la concienciación por el medio ambiente y la sostenibilidad en el que todos parecen estar de acuerdo. 

Son innumerables las iniciativas emprendidas por todas las instituciones insulares en este sentido, el cuidado del medio ambiente, el desarrollo sostenible, la conciencia energética, el reciclaje, el compostaje, y un largo etcétera”, del cual son partícipes los ciudadanos de esta Isla, en una clara apuesta, muestra de concienciación a este respecto. 

Lo cierto es que, aun así, no se ha hablado de esto. Nadie ha sido capaz de tratar a la sociedad herreña como ciudadanos mayores de edad, explicar, transmitir y divulgar lo que haya que explicar en busca de un consenso general acerca de este asunto, del que siendo, meridianamente objetivos, a día de hoy, no se puede estar a favor o en contra debido al grado de desconocimiento al que se ha sometido su tratamiento y que tal vez, dote de cierto resquemor o desconfianza a la opinión pública.

No se trata de estar a favor o en contra del parque, se trata de exponer y explicar, de dotar a la ciudadanía de las herramientas necesarias para que entienda, evalué, aclaren sus dudas, decidan y cuenten con los datos suficientes para formarse una opinión al respecto; más con un tema, que muy lejos de interesar solo a los colectivos más afectados, implica y afecta a todo el conjunto de la sociedad herreña.

Se hace necesario de nuestras instituciones y nuestros representantes hablar más, explicar más, informar más, transmitir más, divulgar más, “o por lo menos algo”, para no vernos abocados a la máxima de la anti-política: “esperar a que las cosas pasen, con la esperanza de que no pase nada”, que es la forma en la que, en los últimos tiempos se abordan y zanjan los grandes temas en El Hierro. 

El mutismo de nuestros gobernantes frente a este y otros temas en El Hierro en atronador.