A la hora de decidir inversiones deberían ser una prioridad las apuestas por la educación,ya lo hemos hecho hace unos días proponiendo la formación universitaria y profesional gratuita en su integridad para los residentes herreños y por la sanidad

Redacción/Nuestro hospital cumple en este 2023 los viente años, y es un orgullo decir que es uno de los más valorados de Canarias por los pacientes. Por esto mismo es importante que enfoquemos nuestro trabajo y esfuerzo en dotarlo con todos los medios posibles.

Y hacerlo antes que las tensiones entre la capacidad de financiación del sistema sanitario público y el crecimiento generalizado del gasto sanitario se expandan. Es decir, debemos anticiparnos a la crisis general de la asistencia sanitaria.

Tenemos que ser capaces de proyectar a largo plazo, porque ya estamos inmersos en un ritmo acelerado de envejecimiento poblacional, también en la isla, así como en un incremento de los factores de riego de la salud.

En este sentido, deberíamos invertir de forma significativa en infraestructuras que nos permitan la asistencia sanitaria, tanto dentro como fuera del edificio. Y esto es algo que es posible que pongamos en practica en la isla, empezando por monitorizar a nuestros mayores.

La monitorización a distancia, la asistencia a domicilio, los servicios de atención centralizada, los portales de asistencia digital, y las acciones de educación para la salud, son ya una realidad que puede estar presente en la Isla de El Hierro si empezamos a invertir lo antes posible en mejorar nuestra sanidad.

Deberíamos tener en cuenta estos nuevos parámetros básicos para, desde el consenso de todos los partidos, llevar a cabo un programa hospitalario insular, a 20 años vista, que nos permita centrarnos en el paciente cada vez más.

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Es un sistema en el que los médicos pueden estar mucho más implicados en la gestión, en la mejora de la calidad y la eficiencia en la gestión sanitaria. Solo así se logra dar un paso hacia un mayor profesionalismo y autorregulación, abandonando poco a poco el sistema gerencial, y hacer una sanidad más competitiva y sostenible.

En este sentido, se trata, a través de fuertes inversiones económicas, de llevar la tecnología al paciente y no tanto el paciente a la tecnología.

La adquisición de equipación de diagnóstico y tratamiento, empezando por Resonancia magnética, densitrómetro, y otros equipamientos propios de patologías más específicas, tales como otro TAC de planificación, Gammacámaras, acelerador lineal, equipo de angiografía vascular, equipos de angiografía neurorradiológica, de braquiterapia digital y de hemodinámica.

Estas innovaciones tecnológicas permitirán poco a poco, contar con más personal técnico, que puedan remitir los resultados al especialista médico, dentro y fuera de la isla; obteniendo así una menor necesidad de camas de hospitalización convencional, y por otro lado a un aumento de los recursos físicos dedicados a la actividad ambulatoria y de asistencia.

En definitiva con esta propuesta de inversión, intentaremos que desde el Gobierno de Canarias, desde el parlamento, impulsar un consenso para que en nuestra isla tengamos las mismas oportunidades de asistencia sanitaria que se tienen en las islas capitalinas.

Ahora mismo los herreños tenemos que desplazarnos para hacer muchas pruebas diagnósticas a Tenerife, cuándo sería mucho más eficiente hacerlas aquí.
Quince millones es la cifra inicial a la que ascendería una primera fase de inversión insular sanitaria en tecnología que nos permitiría adelantarnos a la crisis hospitalaria que está ya a la vuelta de la esquina.