Por Donacio Cejas Padrón.
Dedicaré mi modesta crónica del mes de junio de este año 2009, año de Bajada que quiera Dios transcurra sin turbulencias fratricidas tan dolorosas para los herreños, a resaltar la importancia que tuvieron en nuestra juventud las excursiones al mar de los jóvenes de aquellas ya lejanas épocas de los años cincuenta y sesenta del pasado siglo que ya se nos va alejando, cumpliendo la ley natural.
Quienes hemos nacido en El Golfo, como todos los que nacen en pueblos de costa, desde los primeros años hemos podido contemplar la estampa inmensa del mar que nos rodea, unas veces en calma y otras, las más, embravecido golpeando incesantemente nuestras costas y peñascos. Para los niños de mi época, el mar parecía un lugar muy lejano donde los niños no podían ir, era como algo misterioso, que en invierno producía un ruido monstruoso con olas altísimas y espectaculares, y en verano permitía que los pescadores de Las Puntas y Las Morras lograran bien con sus barquitos a remo o bien desde los pesqueros algunas capturas de peces, especialmente de viejas que casi a diario vendían por los pagos de nuestro valle. No he podido olvidar nunca la estampa cotidiana de aquellos esforzados vecinos, que algunas veces con un burrito, pero muchas otras a hombros recorrían nuestros caminos tratando de vender unos kilos de pescado para llevar el sustento a sus casas, el tiempo me ha ido borrando sus nombres, pero de Las Puntas recuerdo a D. Eulogio, D. Marcelino, D. Benigno, un señor al que llamaban Campos, y algunos miembros de una familia conocida como Los Guzmines, de Las Morras recuerdo a Negrín, y a otros vecinos que no recuerdo sus nombres.
También nuestros mayores de entonces tenían en el mar una despensa que ocasionalmente visitaban para pescar a desde tierra a caña y lograr traer para casa algunas viejas y otras especies de pescado, recuerdo que especialmente los vecinos de Los Mocanes como "Vítor", D. Juan Armas, D. Juan Toledo, D. Antonio Febles, y otros muchos eran asiduos pescadores, sobre todo de la zona de La Playa del Pozo, Los Arroyos, La Playa de Las Viejas, etc.