Redacción/El Ayuntamiento de La Frontera, organiza hoy, miércoles, el acto principal del miércoles de ceniza, el tradicional entierro de la sardina que pone el punto y final al carnaval del municipio, con un recorrido que llevará a una comitiva desde la Plaza del Lagar, en Merece, hasta la plaza Benito Padrón Gutiérrez, para la quema del machango.
Se trata de una tradición recuperada en el año 2013 por la asociación cultural Amador con el apoyo del consistorio municipal.
Esta tradición, se recuperaba en un proceso iniciado por la asociación Cultural Amador, fundamentado en los testimonios de los mayores de la isla y obtenidos con la colaboración de diversas asociaciones del municipio, en base a referencias académicas de investigadores de la Universidad de La Laguna. Según la documentación recopilada “antiguamente, la representación del popular Entierro de la Sardina se representaba con un pelele o machango, cabalgando sobre un equino, que terminaba siendo pasto del fuego entre los desconsolados llantos del cortejo fúnebre”.
Según las mismas fuentes, la sardina tenía apariencia humana y se rellenaba con basa de pino o con colmo y se forraba con costales, sacos o telas. Durante la celebración de esta manifestación algunos asistentes iban con su vestimenta habitual y otros iban de negro. La comitiva lloriqueaba, cantaba y hacía sonar una música alborotadora con bocinas o bucios, golpeando una guataca, cacharros, sonar de las palmas de las manos y hasta algún tambor, tanto a la ida como a la vuelta, la bulla acompasaba la una canción que decía: “La sardina se murió, jo, jo; Y la fueron a enterrar, jo, jo; Veinticinco palanquines, jo, jo; Un cura y un sacristán, jo, jo.”
El alcalde de la localidad, Pablo Rodríguez Cejas, explica que “se trata de una manifestación que junto a los Carneros de Tigaday, forman parte de nuestro carnaval tradicional; tenemos el deber de seguir potenciándolo para no perderlo, ya que nuestro pueblo es uno de los pocos de Canarias que continúa esta tradición”.
Es a mediados de la década de los ochenta cuando se retoma el entierro de la sardina, pero de forma muy diferente al que se celebraba antaño, copiando manifestaciones de otras regiones. Este año, los niños del CEIP Tigaday han podido conocer de primera mano esta tradición, y con ayuda de la asociación cultural Amador y la implicación de sus profesores, han confeccionado el machango con el que el municipio cerrará su Carnaval, perpetuando así otra de las escenificaciones del carnaval tradicional de Canarias.