Sociedad

Redacción/El servicio de asistencia a Personas con Movilidad Reducida de Aena, denominado “Sin Barreras”, que se presta de forma gratuita en todos los aeropuertos con vuelos comerciales, garantiza que todas las personas puedan disfrutar del transporte aéreo con independencia de su discapacidad o problema de movilidad. Los aeropuertos canarios han atendido durante el pasado año 2019 en sus instalaciones a 342.664 Personas con Movilidad Reducida (PMR).

El Aeropuerto de Tenerife Sur fue donde se llevaron a cabo más asistencias, con 114.268 personas atendidas. Gran Canaria, se sitúa en segundo lugar con 92.008 asistencias; el aeropuerto César Manrique, Lanzarote, con 63.683; Fuerteventura, con 33.213; Tenerife Norte, con 28.117 personas; La Palma, con 9.867; El Hierro, con 1.253, y La Gomera, con 255.

Desde Aena aseguran que se ha hecho un gran esfuerzo desde la implantación del servicio para asegurar que ofrezca un alto nivel de calidad. En 2019 fue valorado por los pasajeros que lo utilizaron con un 4,9 sobre una puntuación máxima de 5 en Canarias. 

Este servicio de asistencia a Personas con Movilidad Reducida, ha recibido durante sus 13 años de existencia diversos reconocimientos y premios nacionales e internacionales. Entre estas distinciones destaca el primer premio recibido por parte de Naciones Unidas al mejor servicio público en los Premios UNPSA 2013. Los agentes de asistencia cuentan con una alta cualificación profesional y cumplen con los requerimientos formativos necesarios exigidos tanto por Aena, como por el Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (CERMI).

Redacción/Hoy miércoles 29 y mañana jueves 30 de enero, se celebrarán en La Restinga, al sur de la isla de El Hierro, unas jornadas, sobre el trabajo que vienen desarrollado estos colectivos para dar solución a el grave problema del plástico en el mar, a través del proyecto Repesca Plas, un proyecto que se lleva a cabo gracias a la colaboración directa de la Fundación Biodiversidad, el Ministerio para la Transición Ecológica, a través del programa Pleamar, cofinanciado por el  Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP).

Se trata de un encuentro nacional, en el que participan la cofradía de pescadores de Gandía en la Comunidad Valenciana, o la cofradía de pescadores de Marín de Pontevedra, en Galicia junto a los pescadores herreños. El objetivo de este encuentro es evaluar el trabajo desarrollado hasta el momento y las estrategias de futuro, así como seguir “contagiando” al sector pesquero y al resto de la sociedad, de la importancia de proteger el mar, del plástico.

El proyecto se ha puesto en marcha gracias a la iniciativa del Instituto Tecnológico del Plástico (Aimplas), quienes han iniciado este trabajo coordinando a diferentes entidades pesqueras en el litoral español. La Restinga, y más concretamente el salón Restingolita, será el lugar para celebrar a lo largo de estos días, estas jornadas. 

El patrón mayor de la cofradía de pescadores de Gandía, junto con otro miembro de su cofradía se han trasladado a la isla este lunes 27 de enero, con el fin de conocer de primera mano, el proyecto de pesca absolutamente responsable y sostenible puesto en marcha en El Hierro, a iniciativa del propio sector. 

Para Domingo Ciurana Órtiz, patrón mayor de Gandía, es realmente sorprendente, el éxito de este proyecto, que no sólo ha servido para mejorar la vida de los pescadores, sino que ha contribuido de un modo muy especial con el sector turístico de calidad. Todo ello desarrollado de forma armónica con un buceo de calidad, incomparable, que da vida al pueblo de La Restinga, con unas garantías de futuro, muy halagüeña, ya que los pescadores siguen tomando medidas en favor de una gestión cada día más responsable, lo cual garantiza una mayor calidad si cabe en la visión de los buceadores, que deciden venir a esta isla a disfrutar de unos fondos marinos inigualables en toda Europa.

Las jornadas se inauguran hoy miércoles, 29 de enero, a las 9 de la mañana y tendrán una duración de dos días, donde la isla de El Hierro, se convertirá en el centro de atención nacional, de cómo corregir el mal uso que en muchas ocasiones se le da al plástico.

GMº/La Carrera de El Julan (HI-400) permanecerá cerrada temporalmente por desprendimientos a la altura del Barranco del Tagasate (TM. El Pinar), por lo que el acceso a La Dehesa deberá realizarse por Lomo Negro (HI-500) o por Pista Malpaso (HI-45).

Redacción/Un documental que ha sido producido en el contexto de los encuentros y reuniones que han mantenidos los responsables del Proyecto Ecoáreas Mardetodos con los vecinos del pueblo costero de La Caleta, ciudadanos concienciados en la importancia de la conservación y puesta en valor de los bienes patrimoniales, existentes en la de isla de El Hierro, “un tesoro arqueológico por explorar”. 

Teresa de Las Nieves Ruiz González, arqueóloga y técnico de Patrimonio Histórico de Cabildo de El Hierro, es la encargada demostrar la riqueza de algunos de los yacimientos con grabados geométricos e inscripciones líbico-bereber que abundan en la zona marítimo-costera de la isla. El legado de los Bimbaches, pueblo prehispánico que habitó la isla, resulta un patrimonio único digno de investigar, conservar y transmitir.

El Proyecto Ecoáreas Mardetodos pretende dar la oportunidad de canalizar, ideas y propuestas, en acciones para mejorar el litoral canario, tanto de particulares como de entidades con voluntad de apostar y esforzarse por la sostenibilidad de nuestras costas. un proyecto financiado por la Consejería de Turismo, Cultura y Deportes del Gobierno de Canarias con la cofinanciación del Plan Avanza de los fondos FEDER de la Unión Europea.

La iniciativa Ecoáreas pretende dinamizar espacios costeros de manera participativa, donde cualquier persona o entidad que utilice el área, es decir los beneficiarios, tengan voz, con el fin de preservar los valores naturales y fomentar el desarrollo sostenible de un mardetodos.

La gran diferencia de esta propuesta es que su éxito depende de que siga un modelo de abajo a arriba, desde la sociedad hacia las Administraciones, creando herramientas para que los cambios puedan ser posibles, incorporando en la base del proceso a los beneficiarios del territorio. Es decir, nace de pequeños acuerdos entre usuarios de los espacios que van tomando decisiones en consenso sobre el futuro del mar de todos.