Redacción/El Juzgado de guardia da La Laguna, Tenerife, ha acordado el ingreso en prisión provisional sin fianza de tres presuntos patrones de un cayuco que llegó al muelle de La Restinga, en El Hierro, el pasado 3 de noviembre, acusados de haber asesinado durante la travesía a ocho de los 215 ocupantes de la embarcación.
Estas tres personas forman parte de los siete sospechosos que fueron detenidos por la Guardia Civil a finales de diciembre.
Según ha informado el Tribunal Superior de Justicia de Canarias, a los presuntos patrones del cayuco se les imputan ocho asesinatos y varios delitos de lesiones, trato degradante, omisión del deber de socorro y contra los derechos de los ciudadanos extranjeros (favorecimiento de la inmigración irregular). De acuerdo con los testimonios recabados hasta ahora, las personas que fueron asesinadas a bordo del cayuco durante la travesía fueron seleccionadas para matarlas debido a su nacionalidad, distinta a la de los presuntos responsables.
Los acusados fueron arrestados en el centro de acogida de inmigrantes de Las Raíces, en La Laguna, Tenerife, donde habían sido trasladados tras desembarcar en El Hierro, por lo que el Juzgado de La Laguna se declaró competente para la investigación y caso, que en los próximos días será transferido al Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Valverde, que continuará con las diligencias.
Según la Guardia Civil, la investigación se inició a raíz de los testimonios de los ocupantes del cayuco, que relataron los pormenores del viaje a los agentes.
Tras el desembarco del cayuco, en el muelle de La Restinga, el pasado 3 de noviembre, uno de sus ocupantes tuvo que ser trasladado al hospital insular por una profunda herida en el tórax que podía ser compatible con una puñalada.
Durante las investigaciones, los agentes pudieron constatar que la embarcación había partido inicialmente de Gambia y que realizó una parada en la isla senegalesa de Bassoul, donde subieron la mayoría de los ocupantes. A los tres días de navegación, tres de los patrones, encargados de velar por el orden en el interior de la embarcación, “decidieron tomar represalias contra varios migrantes”, según la Guardia Civil.
“El motivo fue que uno de los ocupantes, posiblemente afectado por la dureza del viaje, sufrió un episodio de desorientación, provocando que los tres patrones le culparon del infortunio del trayecto, infringiéndole a él y a los que le defendían severas palizas. Como castigo, presuntamente decidieron asesinar a cuatro de ellos para atemorizar al resto de migrantes del cayuco”, señaló la Guardia Civil.
Fruto de las investigaciones, el Instituto Armado pudo averiguar que el número de personas asesinadas, en principio 4, asciende, presuntamente, al doble, 8 personas.